Después de su entrevista con Fiar, nuestra redactora Xell continúa conmemorando los 15 años de existencia de la banda catalana Foscor. Una nada desdeñable cifra cargada de historia que se repasa en este artículo con la ayuda de algunas firmas invitadas.

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Los que hayáis leído nuestra reciente entrevista a Fiar, vocalista de Foscor, es muy probable que ya conozcáis a la banda. Es posible que algunos no sepáis quienes son o quizás no les conozcáis en profundidad, así que, aprovechando que este 2016 marcan los 15 años de carrera de la formación, me he tomado la licencia de hacer un especial sobre su recorrido. Foscor se formó oficialmente en 1997 de la mano de Falke, guitarrista de la banda y Fiar, bajista solamente en aquel entonces. Más tarde se les uniría Norax como vocalista, actualmente cantante y alma mater de la también banda de black metal Lux Divina. Tras publicar una demo y un split con los gallegos Xerión, en 2004 salió a la luz el primer disco de la banda: Entrance to the Shadow’s Village, pese a que llevara ya tiempo grabado. Este álbum fue muy bien recibido en la comunidad underground y pronto empezaron a ser un referente dentro del panorama del black metal catalán. Además de caracterizarse por ser el disco debut de la banda, el hecho de que sea el único cantado por Norax (que además también escribió las letras), le da otra personalidad y un aire distinto que no podremos encontrar en los trabajos posteriores. Ni mejor ni peor, simplemente un matiz diferente (ese aire pagano que muchos se atreven a decir) que hace si cabe aún más especial a la banda. Pero Norax tuvo que dejar el grupo y, a partir de entonces, Fiar se encargaría de las voces además del bajo y se les unirían Nechrist a los platos y Wilkhem a la guitarra, formación que quedaría intacta hasta 2011.

En este punto fue cuando yo descubrí a los catalanes. Salía a la luz un tributo a Katatonia, mi banda por excelencia, donde Foscor grabaron una de las mejores covers de la época del tema “Gateways of Bereavement”. Me gustó tanto la versión que realizaron, que necesité escuchar el material propio de la banda (os invito a los que no hayáis escuchado December Songs a que lo hagáis, no os arrepentiréis). Y en el momento en que publicaron The Smile of the Sad Ones se convirtieron en mi banda favorita de la patria. ¿El principal motivo? Sus letras. Porque las bandas no viven solo de música y aunque muchos oyentes habituales del metal se olviden por completo de la calidad literaria de las composiciones, yo, por el contrario, es algo al que le doy una vital importancia. Y si en el caso del debut fue “Al Cor de la Boscuria” la que me conquistó, en el Smile fueron “I Tornà de les Cendres” y “El Palau de les Plors”. El hecho de que sean todas piezas en catalán, no es una declaración nacionalista por parte de servidora, es que, como era de esperar, la banda es mucho más creíble en su lengua materna que no en la inglesa. Las canciones tienen más vida expresadas así y la conexión con sus oyentes es mucho más directa.

Este álbum además fue el que empezó, desde mi punto de vista, a abrirle puertas en el extranjero. Puertas que se consagraron con Groans to th eGuilty y que desgraciadamente con Those Horrors Wither desaparecieron, pero no nos adelantemos a los hechos. Este tercer disco consolidó a la banda como un referente en el metal extremo nacional y, que junto al anterior, forman dos de los redondos que podría incluir en una lista de lo mejor de la pasada década. Además, contiene una de las piezas que a servidora más le gusta de la banda: “l’Hivern per a les Muses”. Por favor, al que no le pongan los pelos de punta los versos de esa canción, sencillamente no tiene alma.

Groans to the Guilty es también el inicio del cambio estilístico de la banda que tanto dio que hablar a finales de 2014 con la publicación de su último disco. El tercer álbum introducía algo más de melodía pero sin alejarse tanto como lo ha hecho el Those Horrors Wither de sus predecesores. También supuso el último disco en el que participaría Wilkhem a las guitarras, que al contrario de lo que muchos creen, su salida no tuvo nada que ver con diferencias artísticas. Motivos aparte, alguien tenía que ocupar su lugar y quien mejor que Albert de los tristemente desaparecidos Vidres a la Sang. Años dedicados a los directos hasta que finalmente Those Horrors Wither  vio la luz. Como ya he dicho en más de una ocasión, este no es el disco que los fans más acérrimos de Foscor queríamos escuchar. Si más no, no es el álbum que yo quería escuchar. Me acabó encantando, pero tardó lo suyo. ¿Es por qué al disco le faltaba calidad? Para nada, puesto es una mezcla excepcional de las influencias que la banda ha ido recogiendo a lo largo de su existencia. Si este disco hubiera salido bajo otro nombre, como álbum debut, seguramente me hubiera encandilado a la primera. Simplemente, no se adecuaba a la idea que yo me había formado de la banda. En propias palabras de Fiar, algo de lo que pueden estar increíblemente orgullosos, es que sus oyentes nos hemos hecho propia su banda, pero esto también comporta sus partes negativas: los cambios son difíciles de aceptar a la primera. Pero no hay nada que un poco de sentido común y paciencia te hagan comprender que, y sin querer repetirme, definitivamente este es el cd que los catalanes necesitaban crear. Una vez llegados a este punto de aceptación, nada me impidió disfrutar de grandes canciones como “Those Horrors Wither” o “To Strangle a Ghost”. A Fiar aún le falta coger más rodaje en cuanto a voces limpias se refiere, pero va por buen camino.

Y bien, si este disco es tan bueno, ¿por qué entonces parece ser que la banda ha dado un paso atrás? ¿Por qué no han sabido trascender fuera de las fronteras nacionales? Desde fuera, todo apunta a una mala gestión de la banda y a meros trámites burocráticos. Porque, calidad hay a raudales y pueden darle más de una patada a bandas que no paran de girar por Europa. Me recuerda bastante al caso de otra banda catalana, Moonloop, que tras llevar también 15 años y haber sacado un disco de proporciones bíblicas como fue Deeply from the Earth, no han acabado de dar el salto. Desde aquí solo puedo indicar que se sigan esforzando, ya que ambas bandas se merecen que sean escuchadas en todos los rincones. Afortunadamente para los protagonistas de este artículo, parece ser que las cosas ya van dirigidas a buen puerto y están recogiendo sus frutos confirmando fechas en el extranjero.

 

 

Algunos os podréis estar preguntando si soy yo la única que profesa tanto amor hacia Foscor, así que para que veáis que no soy la única cabra loca, os dejo con las palabras de otros compañeros de gremio, músicos y otros partícipes de la industria.

 

“Mi inicio de relación con Foscor creo que data de principios del tercer milenio. En aquella época guardaba una estrecha relación con los galaicos Xerión, y es ahí cuando me llegó la primera grabación de Foscor, un compartido entre ambas bandas, dándose la particularidad de que cada banda versionaba a la otra. Previamente había tenido la ocasión de ver a Lux Divina en directo en su primera incursión en Euskadi, con Fiar a los teclados y Norax, compañero del aquel entonces ‘proyecto musical’ llamado Foscor, con quién unos años más tarde compartiría escenario en una de tantas noches nostálgicas en aquella mítica ‘La Cuadra’ (Ikuilua) de Amurrio.

A pesar no de ser muy amigo de las baterías programadas, dicho primer trabajo me impactó severamente, desde la parte musical (¡me encanta la atmósfera de su debut!), pasando por la lírica a la parte meramente visual. Creo que para muchos, un tema como “Al Cor de la Boscúria” se convertiría en todo un himno en directo.

Su evolución todos estos años también ha sido destacable, hasta esta nueva y arriesgada etapa en la que yo llamaría los Foscor 2.0. Pienso que mucho antes tendrían que haber dado el salto ‘internacional’ o fijar su target en Europa, porque su música hubiera funcionado a las mil maravillas en el viejo continente…”

Jonathan Pernía – Pitchline Zine

 "Llevo en esto de la música muchos años. Muchos también en los medios de comunicación y es como si Foscor llevaran ahí desde siempre. Desde mis tiempos en Hell Awaits Foscor han sido una banda a la que tener en cuenta.
Hace ya siete años que Foscor lanzaron “Groans to the guilty”, un trabajo soberbio. Entonces Empire se editaba en formato .pdf y decidí que había que hacerles justicia.
La presentación de ese disco se llevó a cabo en una gira conjunta con Vidres a la Sang con la que recorrieron gran parte de la geografía española. Tuve la suerte de verles en la Faktoria d’Arts de Terrassa, mi ciudad natal. Allí dieron un concierto memorable y ese día se culminó con la primera entrevista que realicé a la banda, a Fiar y Wilkhiem. Me sorprendieron por ser unos tipos muy habladores, sensatos y agradables.
De esa entrevista salió la primera portada que en Empire le dedicamos a Foscor y un especial de siete páginas. Desde aquella entrevista se estrecharon los lazos con la banda y hoy día Foscor es un referente para mí y para Empire."

Marc Gutiérrez - Empire 

 

 

“Elegancia, perseverancia, personalidad, actitud. Hablar de Foscor es hablar de una de las bandas más respetables del Estado, que en sus casi dos décadas de trayectoria han sido, sin duda alguna, uno de los estandartes del metal extremo peninsular, si bien considero que no han terminado de tener todo el reconocimiento que se merecen. Mi primer contacto con el cuarteto catalán fue, si no recuerdo mal, en 2008 con su segundo duración "The Smile of the Sad Ones", precisamente con el tema que da nombre a ese trabajo, desde la primera escucha quedé cautivado con esa gran personalidad que impregna su sonido, así como con la cuidadísima estética de la banda...y ya en su tercer larga duración "Groans to the Guilty" se observaban con más claridad esas inquietudes, ese afán por desmarcarse de las ataduras asociadas a los géneros, inquietudes que florecieron en su aún reciente obra maestra "Those Horrors Wither". Con esta nueva obra, además de renovar su formación y actualizar la receta de sus composiciones, Foscor se suman a esa selecta lista de bandas que rompen con la ortodoxia dentro del metal extremo como Ved Buens Ende, Voivod, Gorguts, Dødheimsgard o Manes, pero manteniendo intacto su sello personal que les lleva acompañando desde su primer trabajo. Pocas bandas estatales he conocido que cuiden tanto sus trabajos como Foscor, ya sea a nivel musical, de formato o de imagen, así como de inquietud: su participación en tributos a bandas como Katatonia o Enslaved, su interpretación en el (lamentablemente cancelado) homenaje al pintor simbolista suizo Arnold Böcklin o su propio DVD conmemorativo de la primera década de existencia del proyecto no son más que algunos de los muchos lanzamientos de una sólida y más que envidiable trayectoria. Por mi parte estoy deseando escuchar ya su próximo material. Junts vers la foscor!”

Daniel Maganto – Eternal Storm

 

“Cuando descubrí a Foscor con su debut 'Entrance To The Shadows' Village' me quedé gratamente sorprendida. Nunca una banda de Black Metal al uso (un estilo del que no soy fiel seguidora) me habían transmitido tanto. No solo hablo a nivel musical, también todo ese mensaje que escondían sus canciones y simbología, con clara referencia a la época Novecentista. Me conquistaron aún más en los siguientes largos, mostrando una evolución constante hasta llegar a su último 'Those Horrors Wither', donde nos sorprendieron a todos sus seguidores. Y pese a que soy una de esas personas a las cuales las piezas 'Those Horrors Wither' y Foscor no han encajado de buenas a primeras, no se puede negar la inmensa calidad que contiene. La única pega de todos estos años bajo el sello Foscor es el hecho de no haber tenido la oportunidad de dar ese gran 'salto' fuera de nuestras fronteras. Calidad no les falta, ganas tampoco.”

Xenia Senserrich – Pitchline Zine / El Octavo Día

 

“Foscor es una de las razones de darte cuenta lo que cuesta valorar al metal extremo en este país. Cuando me estrené en Hell Awaits descubrí a la banda. Cuando colaboré en Mondo Sonoro al hacer un report doble previo a la gira que iniciarían con Vidres a la Sang conocí a Fiar y al resto. Con ellos siempre hay un trato perfecto siempre dentro y fuera de la escena. Creo que Foscor son una de las razones de por qué el metal sigue vivo en este país. Eso sí, quiero ver como siguen después de la evolución que han hecho en “Those Horrors Withers”, no tengo ni idea de por donde avanzarán. “

Eduard Tuset – Mondo Sonoro / Goliath is Dead

 


"Qué decir de una de las bandas con la que he compartido casi la mitad de mi vida, tanto dentro como fuera de sus filas. FOSCOR es como mi segunda familia, un conjunto de mentes inquietas unidas por algo que reside más allá de la música. Fuertes pilares basados en un camino de auto expresión, espíritu y libertad compositiva. Trabajar en unas metas ideológicas parecidas a lo largo de los años, siendo fieles a nuestra naturaleza creativa, siempre intentando crear algo con lo que sentirnos satisfechos ha hecho de nosotros un fuerte eslabón con el que fijar nuestros caminos paralelos. Me alegra y me siento muy satisfecho de la evolución de la banda desde los días en que yo formaba parte de ella. Han sabido reencontrarse con cada paso que han dado, con cada canción y álbum editado. Han pasado diferentes épocas, más dulces y más amargas, pero siempre aportando algo fresco y de calidad sobrada. El trabajo de Foscor a lo largo de estos 15 años se puede definir en tres palabras: Elegancia, Perseverancia y Calidad. Desde los días más primitivos y viscerales hasta los dias más vanguardistas. Estoy seguro que todo lo que haga FOSCOR en el futuro será de calidad, tendrá alma y corazón en su núcleo, por esta sencilla razón, dificilmente nunca cerraré mi mente a una banda con una propuesta tan sólida y profesional como la de estos bastardos imperecederos."

Norax – Lux Divina

 

“Cuando en una propuesta musical convergen la humildad, una exquisita creatividad en constante evolución, autenticidad y profesionalidad, perseverancia, y sobre todo, un mensaje sólido, no queda más que quitarse el sombrero. Más allá de las etiquetas estilísticas, Foscor son un claro ejemplo de ello, y me siento afortunado por haber tenido la oportunidad de vivir y sentir de cerca su faceta musical y humana. Luces, sombras, pasión y emoción, un abismo de intensidad con vida propia. Arte.”

Eric Baule – Moonloop

 

Per molts anys més vers la foscor.

 

Texto realizado por Xell