El pasado 24 de enero veía la luz el noveno álbum de la banda alemana de metalcore Caliban. Hoy Teseo nos analiza este Ghost Empire para intentar explicarnos qué esconde en su interior.

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Es frecuente en este mundo del metal y del rock que siempre haya algún subgénero que no te haga tilín. Pero también es frecuente que dentro de ese estilo que no te acaba de caer del todo bien, encuentres algún grupillo que llame tu atención, que hagas que subas un poco el volumen de tu reproductor y te pares a analizar lo que hacen esos tipos. Ese es mi caso con el metalcore y con Caliban.

Los alemanes me sorprendieron en 2009 con su lanzamiento “Say Hello To Tragedy”, con una combinación extraña en la que el metalcore adquiere elementos del hardcore y estiliza las bases más puras del género. Tras “I Am Nemesis” en 2012, ahora ve la luz su último trabajo “Ghost Empire”.

Es curioso como su metalcore se combina con el djent de grupos como Messugah, TesseracT o Vildhjarta, y elementos más propios del Nu Metal semejantes al de los primeros Linkin Park. “King”, el primer tema del álbum, da buena cuenta de ello. Guitarras al más puro estilo djent, estribillo pegadizo made in metalcore, y mezcla de voces guturales y raspadas.

“Chaos Creation” es puro metalcore, un metalcore bien hecho y con un trabajo de estudio milimetrado. Los elementos más “urbanos” y melódicos se ven reforzados por el grandísimo trabajo de Patrick Grün a la batería y el empujón de fondo de Marco con el bajo.

El tema bandera de esa mezcla metalcore/hardcore/djent es sin duda el tercero del álbum: “Wolves And Rats”. Los trazos melódicos del estribillo lo convierten en uno de los más pegadizos de todo el disco, y hubiera sido un digno single para su videoclip.

“Nebel” cuenta con unos riffs principales llenos de energía, acompañados todo el rato por el buen hacer de la batería, que sin duda pone el broche especial a lo largo de todo el CD. No puede faltar el estribillo pegadizo, donde se “suavizan” las voces y aparecen los coros.

La escucha sigue con “I Am Ghots”, quizá su tema más “djent”, y cuyo estribillo me lleva sin duda a recordar a los Linkin Park del “Meteora”, pero con un matiz mucho más cañero, en lo que es sin duda el tema más demoledor de las 12 pistas que tiene el álbum.

“Devil’s Night” es el tema que escogieron para el clip, y debo decir que no es ni por asomo el mejor del álbum, pese a tener el estribillo más comercial y pegajoso de todos. Le sigue “Your Song” que parece transmitirnos al ambiente de un directo con la entrada de una aclamación del público, con unos riffs influenciados por el djent que traman una buena dosis de caña.

El inicio de “Cries And Whispers” engaña si dejamos correr los segundos y vemos lo que los alemanes nos tienen preparados con este tema. Todo tralla, baterías y guitarras a una acompasadas por el buen hacer de bajo. Lo del estribillo pegadizo con las voces más suaves casi hace falta saltárselo, porque es una constante en un grupo de metalcore. Un tanto repetitivo, pero efectivo.

Gran tema es “Good Man”, y que no os engañe el título. La entrada a la pista es diferente al resto, más suave y melódica, pero los riffs dan cuenta de un cañonazo que hará inevitable que muevas la cabeza de forma inconsciente. El estribillo más currado de todos sin duda.

De “I Am Rebelion” destacaría las percusiones progresivas que le otorgan un halo especial con respecto al resto del álbum, mientras “Who We Are” ofrece un esquema mucho más puritano del metalcore, tema que para mi gusto pasa un poco desapercibido después de un par de escuchas.

Cierra este “Ghost Empire” la pista número 12: “My Vertigo”. Está impregnado de ese hardcore que dicen practicar los propios alemanes, dejando un poco de lado el enfoque metalcore (salvo en el estribillo, de nuevo) que es el que predomina en el álbum.

Puede que haya cosas que siga sin tragar de éste género, como la fórmula repetitiva de los esquemas musicales o los estribillos efectistas, pero eso no quita que no pare de escuchar una y otra vez este “Ghost Empire”. Para los amantes del género puede que sea una joya, para los más reacios a este estilo, tal vez es una buena oportunidad para poner la oreja y dejarse llevar. Sea como fuere, han conseguido que a lo largo de esas 12 pistas mueva la cabeza e imite, manos al aire, los ritmos de la batería.

 

Caliban son:

Andreas Dörner – vocalista
Denis Schmidt – guitarra y voz limpia
Marc Görtz – guitarra
Marco Schaller – bajo y voz de fondo
Patrick Grün – batería

 

Tracklist:

1 – King
2 – Chaos Creation
3 – Wolves And Rats
4 – Nebel
5 – I Am Ghost
6 – Devil’s Night
7 – Your Song
8 – Cries And Whispers
9 – Good Man
10 – I Am Rebelion
11 – Who We Are
12 – My Vertigo

 

Nota: 7,5/10

Review realizada por Teseo