Nos vamos hoy con nuestro "Disco de la Semana" hasta Finalndia para presentaros “Metsutan – Songs of the Void”, el último trabajo de la banda de death metal melódico con influencias niponas Whispered.

¡Pasa y disfruta!

 

 

Más allá de los mangas, los programas frikis y el anime las tierras niponas son una fuente inagotable de inspiración, un basto mundo de influencias que surgen desde la mítica época feudal en la que los samuráis campaban por sus anchas. De aquella añeja época aún se pueden rescatar verdaderos tesoros como la épica, siempre dirigida por el honor, y la música reproducida por unos instrumentos de nombre desconocido pero fácilmente reconocibles.

Whispered, banda finesa de melodic death y power metal, acoge en su último álbum parte de este pasaje de la historia y lo revive con asombrosa complejidad melódica, un proyecto que lleva años gestándose ya desde sus discos previos pero que alcanza su clímax en este último trabajo mostrándose como una preciosa flor de loto.

Con “血ノ舞 – Chi no Odori” el espectáculo comienza con una breve ópera recargada de elementos ceremoniales que exhalan un remarcado dramatismo que se mantendrá dogmático para los temas que precede, siendo “Strike!” el comienzo de la intervención metalera. Fuerte, apasionada y dinámica. Así definimos la música de este cuarteto obsesionado por la teatralidad de una época singular e irrepetible. De insanos contrastes y elaborados nudos compositivos, con “Metsutan – Songs of the Void” presenciamos con asombro una recreación melódica que nos deja catatónicos con el espectáculo sinfónico, épico y veloz que desenvaina el grupo para introducirnos de lleno en un estado de excitación y adrenalina.

La ejecución de todos estos aspectos casi circenses por lo solemne que se escucha en su conjunto solo lo veo comparable a la discográfica de los holandeses Carach Angren, el otro gran grupo que es capaz de ambientar con precisión el dramatismo del mundo al que son afines, los piratas; de hecho, Jouni Valjakka emula una estilo muy rasgado, más cercano al black melódico, mientras sus compañeros sí que llevan a cabo la técnica de los guturales, en un sincronizado y apasionante coro que infla cada tema con impulsos y arranques esporádicos de intensidad indómita, tal y como ha hecho la banda germana Equilibrium.

La instrumentación y otros elementos atmosféricos los podemos etiquetar en tres grupos: la metalera, la folclórica y la épica. Los tres conjuntos están en continua sincronización y la percepción que se tiene de ellos es de puro hermetismo, son plenos y no se le podría añadir nada ni tampoco sería posible quitar un ínfimo elemento sin que notemos su ausencia en esta obra cuidada al milímetro. La instrumentación metalera es de grandes y rítmicos riffs que controlan nuestro cuerpo en agradables sacudidas de cabeza, acompañados de breves pero perfectamente funcionales solos, mientras la batería parece inagotable. La instrumentación épica viene dada casi toda de la ejecución vocal pero también están los añadidos sinfónicos y otros componentes introducidos en la mezcla, como son los fragmentos de audio de voces graves y atractivas narrando algún episodio distante en el tiempo, o voces femeninas fantasmagóricas que susurran como víctimas de una batalla. Por último, lo folclórico despunta con su grácil presencia y exótica melodía, notas agudas por las particularidades de la cuerdas que danzan sin disimulo en un ambiente que se rinde ante su sonido.

Y la buena producción es el factor final que permite a este desafiante disco ser sobresaliente. Con un clara tendencia a resaltar los instrumentos folclóricos no parece haber fallas en su cometido. La medición es excelente, todo se rige por un equilibrio que hace relucir el potencial de cada pieza en esta banda sonora de lo poderoso, lo enigmático y lo cautivador.

En la actualidad la mayoría de los metalheads estamos un tanto alarmados ante el auge del kawaii metal, algunos por su atrevido y peculiar sonido y otros por la proximidad de una nueva ola de metal de dudosa pureza, pero con bandas como Whispered no existe manera alguna de mantener aversión por el metal rejuvenecido por el éter nipón, con álbumes de este calibre la gracia de oriente puede ser la nueva sustancia que complazca a todo amante de la buena música.

 

Tracklist:

  1. 血ノ舞 – Chi no Odori
  2. Strike!
  3. Exile of the Floating World
  4. Sakura Omen
  5. 劍聖 – Kensei
  6. Our Voice Shall Be Heard
  7. 月明 – Tsukiakari
  8. Warriors of Yama
  9. Victory Grounds Nothing
  10. Bloodred Shores of Enoshima

 

Whispered son:

Jouni Valjakka – Voz, guitarra
Mikko Mattila – Coro, guitarra
Jussi Kallava – Coro, batería
Kai Palo – Bajo, coro

 

Nota: 9.25/10

Review realizada por Nui