Desde Tarragona, Ruido Ilegal nos presenta su debut “Que se Oiga tu Voz”. Ocho temas de punk-rock que se convierten hoy en nuestro "Disco de la Semana".

¿A qué esperas para escucharlo?

Los inicios pueden ser buenos, malos o regulares. Pueden dar miedo o afrontarse con rebosantes de valentía. Ruido Ilegal ha saltado al campo por primera vez, ¿será capaz de colarnos “Que se oiga tu voz” por toda nuestra escuadra auditiva?

El disco comienza con un pequeño problema. “Ruido sospechoso” inicia una melodía con esencia potente pero que no termina de ofrecernos ese estallido necesario. Ello, sumado a que a la voz parece terminarle un último empujón para encajar en cuanto a sonoridad, da como resultado un tema que podría ser muy bueno teniendo en cuenta que es pegadizo, pero que se queda a caballo entre eso y lo mediocre.

El segundo plato del menú tiene muy buena pinta, más que nada porque para su elaboración se han cogido ingredientes de la cocina italiana. Concretamente a Dema de Talco, cuya presencia solo puede augurar buenas sensaciones. “La última danza” ofrece un ritmo que recuerda mucho a la banda italiana de moda, pero consigue una gran variación rítmica que, cuanto menos, sorprende. Se utilizan los vientos de Talco, los coros presentes en alguna que otra muestra talquera y una mezcla de reggae, ska, rock y diversión que dan como resultado un muy buen tema.

Con mucha fuerza aparece “Freetown”, en estilo de punk rock de ese que viene de la tierrina astur más que de Tarragona. La utilización de tiempos que hacen, los golpes secos de batería, el juego con los silencios y la calma que rompe en tempestad pide, incluso, alguna frase en bable de esas que tanto nos gusta que hagan Desakato. Porque sí, es un buen tema, pero sabe demasiado a una mezcla entre Desakato y Mala Reputación. En esta línea energética estalla “Generación del 27”, con unos riffs de guitarra realmente buenos, capaces de acompañar a vientos skap-reggae de corte Trashtucada y, de lejos, La Raíz. Estos instrumentos que tan bien están ejecutando hasta el momento, siguen destacando en “Navegando en tierra” pero esta vez suenan ligeramente más sucios, a falta de una última pulida que se puede perdonar por la buena calidad general del tema. Ruido Ilegal tienen la clave del éxito y por ello mismo la demuestran: combinación de potentes guitarras con alegres vientos.

Si hay que destacar algo que llame muchísimo la atención de “Instinto animal”, es sin dudar a dudas su letra, directa y reforzada por unos incisivos coros que, acompañados por potentes riffs desembocan en un tema que llama a directo, a escenario, a concierto a poder ser al aire libre. Elisa C. Martín será la colaboradora de honor para los dos últimos temas del redondo. En primer lugar entra en escena “Somos más fuertes” con fórmulas guitarrísticas no mostradas hasta el momento y la mejor versión vocal desde la colaboración con Dema. El telón se cae de la mano de “Fuga de cerebros”, que se presenta sin tapujos desde el primer segundo, tan solo con la versión melódica mostrada. La letra, sin tapujos de nuevo, acompaña a una voz que está al borde de reventar de energía. La música agoniza, pero ellos están dispuestos a darlo todo antes de su partida.

“Que se oiga tu voz” supone todo un salto a la piscina con mucha, mucha agua. Se trata de una apuesta bien hecha con un fuerte respaldo melódico cargado de ganas de escupir al sistema actual pero de divertirse al mismo tiempo. Ruido Ilegal tiene sonido a muchos sonidos a la vez y eso, en un primer disco, es algo comprensible. Tanto como resulta inconcebible el buen debut de los de Tarragona.

Tracklist:

1. Ruido sospechoso
2. La última danza
3. Freetown
4. Generación del 27
5. Navegando en tierra
6. Instinto animal
7. Somos más fuertes
8. Fuga de cerebros

Ruido Ilegal son:

Fran Rosa – Guitarra y voz
Litus Alemany – Bajo, voz y coros
Raúl Borrás – Guitarra, voz y coros
Dani Porta – Batería

Nota: 8’75/10

Review realizada por Miriam