El pasado sábado asistimos a la celebración del Desván Fest III en la Sala Sir Laurens de Oviedo, una velada repleta de heavy metal envuelta en un excelente ambiente. Dünedain, Monasthyr, Lethargus, Vaklyria y la despedida de la Sir Laurens, ¿nos lo íbamos a perder?
¡Aquí os dejamos la crónica y fotazas de NachoGS!
Después de varios aplazamientos por fin se pudo celebrar el esperado Desván Fest III, con un interesante cartel compuesto por cuatro punteras bandas del panorama nacional : Valkyria, Lethargus, Monasthyr y Dünedain.
Los encargados de comenzar el festival fue la banda bilbaína Valkyria, a pesar de comenzar con media hora de retraso aún había escaso público en la sala, como tantas veces suele suceder en estos casos. La joven banda no se arrugó en su primera visita a Asturias e interpreto varios temas de sus hasta el momento dos únicos trabajos:” Principio y Fin” y “En Tierra Hostil “. Valkyria logró dar buena cuenta de su heavy metal melódico sobreponiéndose a algún pequeño problema técnico. Antes de finalizar Yeray, voz y guitarra, hizo la presentación de sus compañeros y para rematar la faena interpretaron un clásico de la banda, “Tus Secretos”, con el que abandonaron el escenario dejando una buena impresión entre los asistentes.
A continuación, turno para Lethargus y su interesante propuesta de metal progresivo. Los madrileños llegaban a Asturias para presentar su último trabajo “Eclectia”, del que sonaron un buen puñado de temas como “Destino Cruel”, “Más de mil años” o “La Noche más Oscura”. El público fue entrando poco a poco en su universo, gracias la buena labor de su frontman Cesar Ortiz, que estuvo muy acertado tanto a nivel vocal como escénico sabiendo llevar al público a su terreno. Por supuesto, estuvo muy bien arropado por el resto de sus compañeros: Sergio al bajo, Juanjo y Miguel a las guitarras, Elena a los teclados y Eduardo a la batería. Un buen concierto el que nos ofreció el sexteto y que remataron con ”A Vida o Muerte” y “Triste Mortal” de su primer trabajo con el que se despidieron de los parroquianos.
Llegaba el turno de los locales Monasthyr, que como no podía ser de otro modo salieron a tope para presentar su último trabajo “Eterno Linaje”. Una vez más la entrega de la banda fue total, arrancaron con las primeras notas de “ Cómplice de Traición” acompañados por una pequeña descarga pirotécnica. No faltó el habitual tono festivo y desenfadado de la banda en sus actuaciones, aunque en esta ocasión se trataba del penúltimo concierto de su carismático guitarra Axel, hecho que añadido al cierre de la Sir Laurens tal y como hoy la conocemos, hacía que en el ambiente se respirara un cierto aire a fin de ciclo. Uno de los momentos álgidos del show fue cuando se subió al escenario Carlos de Düdenain para cantar en “Solitario”. El tema de “Eterno Linaje” en el que ha hecho una colaboración con los asturianos. Además, en ese momento también se uniría a la fiesta David, el nuevo y jovencísimo guitarrista Monasthyr. El concierto prosiguió con tres guitarras para disfrute de todo el personal y con este formato atacarían los dos últimos temas de la noche, el que da nombre a su último trabajo “Eterno Linaje” y “Ángel Vengador” con el que pusieron el broche de oro a su emotiva actuación.
El retraso acumulado hizo que Düdenain se subieran al escenario pasada la medianoche, nos ofrecieron un concierto repleto de entrega y heavy metal de alto octanaje. Los abulenses salieron dispuestos a arrasar con todo, desde la inicial “A Un Paso Del Cielo” y no bajaron el pistón ni un momento en la hora y media de temazos que nos ofrecieron. A la base rítmica demoledora formada por Alberto y Miguel, se unen las guitarras de Mariano y Tony, alma máter de la banda, que forma una combinación perfecta con la voz de Carlos que domina a la perfección todas las facetas que debe poseer un buen “frontman”.
Düdenain tienen el aura de banda grande, conservan la energía de los que empiezan y se nutren del poso de la experiencia de músicos curtidos en mil batallas. Gracias a su entrega incondicional lograron dar a nuestra querida sala Sir Laurens la despedida que se merecía. La recta final fue apoteósica con tres cañonazos como “Fiel a mi libertad”, “Por los siglos de los siglos” y “Corazón de invierno”, con la que cerraron su actuación y una nueva edición del Desván Fest, que una vez más volvió a cumplir con todas las expectativas.
Crónica y fotos: NachoGS