La gira protagonizada por los daneses Baest y los asturianos Blast Open llegaba a su fin el pasado lunes en la Sala Gong de Oviedo. No quisimos perdernos esta cita así que hoy os traemos la crónica de la noche con fotos de NachoGS.
¡No os perdáis esta crónica!
A pesar del incómodo día de la semana, la sala Gong Galaxy Club de Oviedo lució un buen aspecto, se notaba que había cierto "hype" por ver las evoluciones de ambas bandas. Se hizo de rogar, pero al fin llegó el momento de que Blast Open presentara en casa su excelente último trabajo "Spitting Blood". Los asturianos salieron a por todas comenzando con el tema que abre el nuevo material, "Riding on a Dead Horse". El cuarteto salió a por todas como era de esperar, para acto seguido atacar "Fallen Angel" y "Pray Without Fear", propiciando que el concierto fuera ganando rápidamente en intensidad. Pudimos observar a Nefta aún con problemas de movilidad tras su reciente operación, pero esto no impidió que la dupla que forma con Andrés funcionara a las mil maravillas.
La formación de los renovados Blast Open que pudimos ver en Oviedo la completaron, Ton a las cuatro cuerdas y un viejo conocido de la afición asturiana como es Marco Álvarez, actualmente militando en las filas de NueveConDiez. Se hizo tremendamente corto el set de los asturianos, en el que incluyeron "Blinded" de su primer disco "They destroy our world", que sonaría justo antes de la despedida que llegó de la mano de "Trying to escape". Cuarenta minutos de pura tralla que dejaron a la audiencia satisfecha, aunque con ganas de más.
A continuación, turno para los daneses Baest que presentaban su último EP "Justitia", la banda capitaneada por un elocuente Simon Olsen, ofreció una auténtica lección de death metal y buen rollo sobre el escenario. Arrancaron con "As Above So Below", "Abattoir" y "Ego te absolvo", con un sonido atronador que emanaba desde el escenario e impregnaba hasta el último rincón de una Gong que parecía venirse abajo con cada pegada del batería Sebastian Abildsten. El agasajo sónico de los daneses continúo con temas como ""Meathook Massacre" o "Sodomize", ante una audiencia totalmente entregada y enajenada.
La intensidad no decayó en ningún momento, era el último concierto de la gira y había sed de fiesta, vocablo pronunciado por Olsen en su español particular. La dupla formada por Lasse Revsbech y Svend Karlsson secundaba sus palabras, ya que se les vio disfrutar intensamente de cada riff, mientras que el bajista Mattias Melchiorsen seguía el ritmo con su hermoso Rickenbacker y nos regalaba a los fotógrafos alguna que otra mueca para la posteridad. Con su "Necro Sapiens" pusieron a todo el público de la Gong a cantar y nos emplazaron para una nueva cita en el Resurrection Fest.
En resumen, excepcional ambiente y tremendo fin de gira para ambas bandas el vivido en la capital asturiana.
Crónica y fotos: NachoGS