Otro fin de semana que disfrutamos de música en la sala Porta Caeli de Valladolid y van... Esta vez llegó al fin el momento de recibir el tour de presentación de "VI", el último disco de Zenobia.

¿Queréis saber cómo fue la noche? ¡No os perdáis esta crónica!




El pasado viernes 4 de febrero, tras un aplazamiento el mes anterior, teníamos una cita con Zenobia en la sala Porta Caeli de Valladolid, donde los riojanos vinieron a presentar su último trabajo, "VI", que para mí es de largo el mejor de la banda hasta ahora, por lo que no quería perderme una parada de esta gira de presentación.

Con una entrada algo floja, más o menos un tercio de la sala, se abrieron las puertas a las diez de la noche para que media hora más tarde comenzara el show de Jorge Berceo y los suyos con la intro de "VI", seguida de "Sin perder la pasión", que me encanta para abrir un concierto con esas voces poderosas que tiene y "La danza del diablo", un comienzo exactamente igual que el de su último trabajo. Tras los pertinentes agradecimientos por parte de Jorge a público, sala y organizadores, le tocó el turno para canciones más antiguas como "La fiebre del oro", "Entre tinieblas" y "El pacto", que me gustó como sonó.

Tocaba bajar las revoluciones y llegó el primer momento balada de la noche con "Vuelve", a la que seguirían "Sigo rugiendo" y la épica "El último bastión", esta última funcionando especialmente bien en directo, ambas también de su último trabajo. Y es que como el propio Berceo dijo, la banda tiene mucha confianza en él, cosa que no me sorprende para nada porque el salto de calidad que ha dado la banda en su última etapa es notable. Lo que sí me sorprendió es que de los pocos temas del disco que dejaron fuera del repertorio, dos de ellos fueran "El laberinto" y "El príncipe de la oscuridad", que para mí son de lejos las mejores composiciones, aunque sí me comentó Jorge que pretendían meterlos en set list para futuros shows.

El salto de calidad que comento de la banda no es sólo a nivel de disco, sino que en directo la banda suena mucho más potente que antes, y es que, tener dos guitarras donde antes había solo una, mejora mucho la cosa. Y hablando de guitarras, me encantó Marcos Lorente, cómo toca, su actitud en el escenario y especialmente el trabajo de coros espectacular que hizo durante todo el show. Chapó. (Opinión no condicionada por el hecho de que me diese una púa). El show siguió con alternancia de canciones antiguas como "Ícaro" con otras nuevas como "No me dejes caer" o "Tu amistad". Me sorprendió para bien "Militia est vita", rapidísima y con esas orquestaciones atronando en el estribillo que quedaron en directo como una de las mejores de la noche, igual que "El sueño de un loco", una de las mejores canciones del grupo, que supo imprimir esa fuerza e intensidad que tiene el tema perfectamente, me encantó.

Otro gran momento, y probablemente el que más disfruté, fue cuando se quedaron solos en el escenario Jorge y Ernesto para empezar con "Ante tus ojos", que es un baladón y fue cantada con mucho sentimiento por Jorge, acompañado del público que se hizo oír. La recta final del show empezó con "Ángel negro", "Borraré tu nombre" y "Jamás", que obviamente funcionó muy bien en directo, y es que con ese estribillo es imposible que no lo haga. Para despedir, dos temas muy antiguos y que nunca faltan: "La tormenta" y "Lo llevo en la sangre", que puso el broche final de fiesta con parte del público encima del escenario y repitiendo el estribillo hasta la saciedad, demasiadas veces para mi gusto, aunque tampoco voy a esconder que este tema, por mucho que sea su bandera, no me gusta. Terminó así un buen concierto, del cual me llevé la sensación de haber visto a una banda en un gran momento, con una mejoría notable y una solidez mayor de la que tenía antes.

Crónica por Luis Martin